CASA PASIVA CADAVEDO
Villademoros, Valdés, Asturias
OBJETIVOS ENERGÉTICOS
Demanda de calefaccion menor a 15 kwh/m2a bajo el estandar Passivhaus. Criterios bioclimáticos
ESTADO
En construcción
El edificio proyectado, para uso como vivienda unifamiliar, se ha diseñado según el programa de necesidades planteado por la propiedad y con el objetivo principal de realizar un edificio de consumo energético casi nulo, anticipándonos así a la entrada en vigor de la Directiva 2010/31 de la Unión Europea, donde se establece que todos lo edificios privados han de cumplir estos niveles de consumo, y que entrará en vigor en 2020 (2018 para los edificios públicos). Para ello, se toman como referencia las limitaciones de demanda y los criterios de diseño y construcción establecidos por el Estándar Passivhaus.
Para conseguir cumplir estos parámetros, es fundamental conocer en detalle las condiciones climáticas del lugar y hacer un uso inteligente, térmica y ambientalmente, de lo que ofrece el «exterior» a beneficio del «interior». Con estas premisas, será posible proyectar una solución optimizada y conseguir una vivienda que conjugue un elevado confort interior y un consumo energético casi nulo. En base a esto, como punto de partida para la realización del proyecto, se ha hecho un estudio de la climatología local, desarrollando una serie de tablas, gráficos y diagramas que determinarán la propuesta. Todos estos datos y análisis, se incluyen en el Anexo 2 del proyecto básico.
De todo ello, consideramos que tenemos tres elementos principales. En primer lugar, el soleamiento, ya que gran parte de la energía necesaria para calefactar la vivienda viene dada de forma natural por la radiación que nos aporta. En segundo lugar, el viento, que influye notablemente en las pérdidas energéticas de la vivienda ya que «roba» calor a sus cerramientos por efecto de la convección y es una constante en invierno dada la posición de la parcela, en una zona llana próxima al mar y sin ningún elemento de protección. Y en tercer lugar, las vistas hacia el mar y el paisaje, situadas al norte y noreste, por lo que la apertura de huecos hacia estas resulta perjudicial a efectos energéticos, pero que constituyen algo irrenunciable si se dispone de ellas. Esto hará que se abran ventanas hacia su orientación mayores de lo habitual en una casa pasiva, lo que se ha planteado de la forma más comedida y equilibrada posible.
Motivado por el programa de necesidades planteado por la propiedad, la propuesta parte en su origen de una disposición de planta rectangular alargada en el eje noroeste-sureste, sección con cubierta a dos aguas y altura necesaria para albergar en su interior una vivienda de planta baja más bajo cubierta. Partiendo de esta base, ni mucho menos óptima respecto a las condiciones del entorno, el proyecto se desarrolla y evoluciona siguiendo la secuencia que se explica a continuación, buscando dar una respuesta más específica al lugar en el que se ha de ubicar la vivienda.
En primer lugar, si analizamos la disposición de planta rectangular, vemos que esta no nos ofrece ningún tipo de protección respecto a los vientos dominantes, que barrerían completamente las fachadas norte y sur e incidirían directamente en la oeste. Como comentamos anteriormente, la situación de la parcela hace que el viento sea uno de sus condicionantes climáticos más determinantes.
Por otra parte, si pensamos en la habitabilidad de la planta bajocubierta, nos encontramos con que la disposición de sección a dos aguas tiene muchas limitaciones en relación con la captación de radiación solar. La opción de utilizar sistemas tipo Velux genera problemas de sobrecalentamiento en verano, ya que la altura del sol hace que este incida directamente sobre el plano de cubierta. Además, tienen unas dimensiones reducidas y las vistas serían casi inexistentes. La opción de utilizar casetones también resulta limitada por la normativa, ya que no son predominantes en la zona. En los esquemas siguientes, correspondientes a la fase de redacción de proyecto, vienen reflejados estos condicionantes:
De la necesidad de introducir luz y poder disfrutar de las vistas del entorno en la zona habitable del bajo cubierta, que supone gran parte de la superficie de la vivienda, surge la idea de realizar un «vaciado» en el volumen planteado inicialmente, de forma que haya una zona del bajo cubierta en la que no tengamos uno de los faldones de cubierta. Con ello generamos una fachada vertical hacia este espacio, donde podremos abrir huecos que nos permitan introducir luz y con ello radiación solar y desde los que podremos disfrutar de las vistas.
La idea comienza planteándose de forma sencilla, como muestran los siguientes esquemas, para analizar los condicionantes que determinen cómo realizar dicho «vaciado».
Retomando el análisis de la disposición en planta rectangular, e introduciendo a mayores la idea de vaciar el volumen, la solución que plantea el proyecto surge de un juego geométrico encaminado, en primer lugar, a generar la protección necesaria respecto a los vientos dominantes en la parcela; y en segundo lugar, a realizar el vaciado sin afectar a un frente excesivo de fachada y sin generar un estrechamiento del espacio interior que rompa su continuidad y complique su distribución y funcionamiento.
La siguiente secuencia representa el proceso seguido en el desarrollo del proyecto, indicando los motivos que han llevado a realizar cada una de las modificaciones respecto a la geometría de planta rectangular y sección con cubierta a dos aguas planteada inicialmente: