Para conseguir cumplir los objetivos passivhaus hay que aplicar 6 principios básicos:
DISEÑO BIOCLIMÁTICO
El primer paso para cualquier edificio que quiera consumir poca energía es realizar un análisis profundo del clima y microclima del lugar, y de los condicionantes de la parcela: orientación, vientos dominantes, vistas, elementos de sombreamiento, etc.
ELEVADO AISLAMIENTO TÉRMICO
En función del clima y la ubicación del edificio, se determinarán los espesores de aislamiento térmico necesarios para conseguir una mayor eficiencia energética. Para evitar los puentes térmicos el aislamiento se ha de colocar de manera continua en toda la envolvente térmica.
AUSENCIA DE PUENTES TÉRMICOS
Los puentes térmicos son zonas de la envolvente térmica en los que el calor o el frío se transmite de manera más fácil; es decir, zonas donde se interrumpe el aislamiento o este se reduce considerablemente. Un edificio passivhaus se ha de diseñar sin puentes térmicos y/o estudiarlos para considerar su efecto y así evitar problemas de condensación y pérdidas de calor del interior del edificio.
VENTANAS Y PUERTAS DE ALTAS PRESTACIONES
Optimizar la dimensión y ubicación de los huecos del edificio ya que son los puntos más débiles de la envolvente y, por ello, es preciso instalar carpinterías y vidrios de alta calidad para limitar al máximo la fuga de energía a través de ellos.
VENTILACIÓN MECÁNICA CON RECUPERADOR DE CALOR
La ventilación de la vivienda se realiza a través de este sistema, que aúna eficiencia energética, ya que en invierno recupera el 85% de la temperatura del aire interior de la vivienda, y salud, ya que es una ventilación constante que permite tener una calidad del aire interior óptima en todo momento.
ESTANQUEIDAD AL AIRE
Asegurar una envolvente estanca al paso de aire. Se comprueba mediante el test de Blower Door. La infiltración de aire es el flujo incontrolado de aire que ingresa a un recinto a través de agujeros no intencionados y de grietas o fisuras en la envolvente de la vivienda. Estas infiltraciones dan lugar a un mal comportamiento energético de la vivienda y avl disconfort asociado a las corrientes de aire que se producen en el interior.
Y, en lo que se refiere a los aspectos metodológicos, haciendo un seguimiento del balance energético del edificio, durante todo el proceso y utilizando para ello el programa PHPP.
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