El estándar Passivhaus, que lleva aplicándose más de 25 años, es el modelo de referencia de los edificios de consumo energético casi nulo que la normativa europea ha impuesto para el año 2021 como la única alternativa posible para frenar el deterioro medioambiental y procurar la sostenibilidad. Y lo es porque va mucho más allá de las exigencias oficiales, situándose por ello a la vanguardia de la construcción energética y eficiente.
Los beneficios de vivir en un edificio pasivo no son solo una cuestión de ahorro energético y de reducción del consumo de energía; para nosotros, la clave está en garantizar un máximo confort térmico y, simultáneamente, conseguir espacios interiores saludables para los habitantes.
Es por ello que, cómo técnicos, apostamos por implementar esta metodología de trabajo en todos los proyectos del estudio, tanto en obra nueva como en rehabilitación.
Passivhaus es… Confort, salud, iluminación natural, descanso...
El SOL es la principal fuente de calor y, por tanto, si sabemos aprovecharlo, apenas necesitaremos aportes de calefacción. La vivienda Passivhaus optimiza, además, el calor corporal de los habitantes y el generado por los electrodomésticos al funcionar.
Son viviendas con la mejor iluminación natural posible.
El confort térmico en el interior es muy elevado. Las temperaturas son muy homogéneas y estables, incluso en la superficie interior de las paredes, cubierta y suelos.
La calidad del aire interior es en todo momento óptima. El sistema de ventilación interior de la casa pasiva refresca el aire interior las 24 horas del día, higienizándolo y eliminando la humedad excesiva para mantener en todo momento un ambiente interior saludable y confortable.
Se eliminan olores y se reduce la acumulación de polvo.
Máximo confort acústico, gracias al aislamiento de ruidos procedentes del exterior.
Por todas estas características, la vida y el descanso en una casa pasiva resultan, comparativamente, mucho mejores.
Passivhaus es… Ahorro energético, económico
Ahorro de hasta un 80-90% en la demanda de calefacción y refrigeración.
Reducción drástica de los costes energéticos de la vivienda.
Posibilidad de asociar sistemas de energías renovables para el consumo total del edificio.
El precio de construcción de un edificio pasivo puede suponer entre un 4 y un 8% de sobrecoste respecto a el mismo edificio construido de manera convencional; por el contrario, la hipoteca energética de este último es mucho mayor. La amortización del sobreprecio de un edificio pasivo se consigue a los pocos años y, a partir de este momento, hay un significativo ahorro al ser su gasto energético mucho menor.
Passivhaus, se puede aplicar a cualquier edificio…
De obra nueva o rehabilitación de:
Viviendas unifamiliares, pareadas, plurifamiliares
Edificios residenciales
Edificios de oficinas
Reformas de pisos o locales
Edificios protegidos existentes
Equipamientos con cualquier uso
Passivhaus es… Fiabilidad
Las monitorizaciones de temperatura interior, humedad y CO2 que hemos llevado a cabo en algunas de nuestras viviendas certificadas, demuestran que, si se realiza un proyecto riguroso bajo el estándar Passivhaus, los edificios funcionan como se han calculado y proyectado.
Como técnicos y usuarios de una casa pasiva, esta es la razón fundamental que nos llevó a tomar la decisión de que todos los proyectos realizados en el estudio se harían bajo el estándar. Desde un punto de vista profesional, con esta metodología de trabajo evitamos cualquier problema constructivo y, como usuarios de una vivienda pasiva, sabemos y hemos comprobado que este tipo de construcciones reúnen los criterios y exigencias necesarios para conseguir una vivienda lo más confortable y sana para sus propietarios.
¿TE APETECERÍA VISITAR UNA PASSIVHAUS?
Si tienes curiosidad y te gustaría conocer de primera mano cómo se vive en una Passivhaus, ponte en contacto con nosotros. Te podemos enseñar viviendas terminadas y habrá familias que te explicarán cómo es su día a día viviendo en una Passivhaus.